Julián es un Virgo modesto, con una gran influencia librana, que le relaja y permite disfrutar de las bondades de la vida. Muy intelectual y reflexivo, con tendencia a querer encontrar una explicación racional a la vida y encontrar un poco de la paz, que ese Plutón tan intenso le roba al obligarle a cuestionar todo desde la raíz.
La Luna de Julián está en Géminis y no se siente del todo cómoda. La Lunita, tan maternal, emotiva, acuosa y dependiente, se encuentra en el signo más contradictorio y más inquieto de todos. La Luna es emoción y Géminis pensamiento. Y del rápido. La Luna es mono y Géminis es multi. La Luna quiere estabilidad y Géminis se horripila cuando escucha esa palabra. Si sumamos a esto la poca agua (sentimientos) que tiene en su carta, es lógico que Julián sienta que no puede resistir tanta contradicción y desee ser una piedra inconmovible.
Por partes.
Llama la atención que siendo hijos de la misma madre (enhorabuena Señora, hay que ver que pedazo de hijos le han salido) Kco y Julián, no han recibido la misma influencia. Los dos la adoran, pero Kco se ha quedado con todo y Julián con una parte.
Me veo en la obligación de unirme un poco a Julián a la hora de hablar de su Luna en Géminis. Julián y yo somos tremendamente afines (no es por presionar, che, te lo juro que es así). Mucho aire, una Luna comunicativa y poca agua. Mi Luna está en Libra, signo de aire también y creo que se nos suele tratar de manera injusta. Las Lunas en fuego por intensas, las de agua por masocas, las de tierra por fiables, todas parecen tener algo que gusta más que una Luna en aire. Se nos tacha de fríos, mentirosos, infieles, despegados, por enumerar algunos de nuestros “defectos”. Pero claro, cuando el mundo se pone patas arriba y no entiendes nada ni sabes que decisión tomar ¿a quién le vas a dar el coñazo? A tu amig@ con Luna de aire, porque sabes que te escuchará, que no te juzgará, que detectará tu estado de ánimo y después será capaz de desmenuzar el embrollo en el que te metiste, con la objetividad que a ti te falta. Y esto es un puto don.
Queda muy bonito parecer que “vives” más. Tendemos a tomar como incompatibles la razón y la pasión. Parece que sentir excluye el pensar y viceversa, y en la vida hay que hacer de todo. Sí se pudiera crear una carta natal ideal debería existir una proporción de planetas, signos y elementos. Ni más de una cosa u otra, un poquito de todo. Julián es una persona cuyo punto fuerte es la intelectualidad y la comunicación y anda algo escaso de emocionalidad, cosa que no significa que sea frío, más bien, que lo emotivo es un terreno que le cuesta reconocer y manejar. Es una cuestión de “torpeza”, no de ausencia. Al don de la objetividad se le saca mucho rendimiento. Partiendo de la neutralidad es como se logra alcanzar la distancia necesaria para juzgar a todos, incluido uno mismo, con la mayor imparcialidad posible, y que te salva de hacer de la autocompasión una residencia permanente. El riesgo es que el alivio que se encuentra al razonar con lógica, se nos vaya de las manos y rechacemos cualquier impulso por sistema, justificando que no merece la pena complicarse la vida por algo tan poco fiable como los sentimientos.
Si la Luna es el refugio al que todos acudimos de vez en cuando, en Géminis el consuelo se encuentra en la información, lectura, aprendizaje, y por supuesto, en la comunicación. Julián es rápido de mente, no me extrañaría que también tuviera la capacidad de leer rápido y recordar lo leído con detalle. Tiene una curiosidad estudiantil que no le abandonará así llegue a los cien años. Quizás sea poco constante, aunque pienso que siendo Sol en Virgo, prevalecerá su sentido de la responsabilidad. Todo lo nuevo le llama la atención, no juzga hasta que no conoce una idea, pero por mucho que se entusiasme, si al profundizar en la materia (o persona) se aburre, cambiará de tema inmediatamente. A Julián le encanta conversar y contrastar opiniones. Todo esto es como muy “mental” pero la Luna protagoniza y rige la mayoría, si no todas, nuestras respuestas emocionales, y aquí es donde viene el patinazo.
Una persona orientada hacia la reflexión por su Luna necesita comprender la teoría de la vida. Incluida la de sus sentimientos y por eso, ante una situación emocional es muy fácil que Julián se sienta desbordado. La razón no es otra que el mal manejo de los propios sentimientos que genera dicha situación. Su impulso automático es el de tomar distancia, ser neutral y abordar el asunto con talante dialogante y lógico. No hay que olvidar que su Asc está en Cáncer y que su percepción es alta, quiero decir, sus emociones están ahí, enterraditas y cuando salen fuera lo hacen sin control alguno. Y la falta de control es algo que pone muy nervioso a un Virgo. Julián tiene que pelear contra el efecto que le producen las emociones de los demás, las suyas propias y lo intenta desde la razón. Ahí viene el cortocircuito. La lógica de los sentimientos no tiene que ver con la lógica tal cual. La influencia de Libra le hace muy susceptible a la agresividad, que no soporta ni tolera, y que aunque no dudo de su capacidad de reacción, en el fondo le entristece mucho no poder solucionar por las buenas sus conflictos. Los reproches que surjan por el camino harán mucha mella y Julián posiblemente se esfuerce en controlar el daño. Para ello razona, pero como no es una máquina, la vehemencia y el padecimiento ajeno le afectan. No es muy difícil hacer que Julián se sienta culpable. Su Sol en Virgo siempre creerá que podía haber hecho mejor las cosas, su stellium en Libra depende más de lo que le gusta reconocer, de la opinión de los demás. Ahora bien, encabronado la cosa cambia. Es un argumentista nato y muy rápido, al que es muy difícil superar en acidez. Los chantajistas emocionales están perdidos con Julián. Los que solo buscan camorra, también.
Su Luna está en la Casa XI, la de los amigos e ideales colectivos. Es la casa del grupo y Julián es ahí donde se nutre emocionalmente. El intercambio, la conversación y la complicidad con sus amigos, le hacen sentir seguro. El primer aspecto negativo es una cuadratura Sol en Virgo y Luna en Géminis. Hay cierto desfase sin solución, entre tus aspiraciones y emociones. Virgo es inseguro, pero es activo. Virgo ante cualquier cosa de la vida se preocupa, sobredimensiona, saca fallos y se caga de miedo. Pero su alto sentido de la responsabilidad no le permite quedarse quieto. Algo tiene que hacer y lo hará. Hasta ahí bien. Lo malo es que la Luna geminiana tiñe sus emociones en forma de dudas “técnicas”. Comenzará a vacilar, a pensar demasiado y a poner todavía más nervioso a su Sol en Virgo. Hay una tendencia a desplegar demasiadas opciones, que en el fondo lo que hacen es demorar la actuación ante la situación que tenga entre manos. Pero bueno, son como nervios y la experiencia, verse así mismo como va superando obstáculos, será su mejor ayuda. Lo de bueno de ser Virgo, y de Julián en particular, es que aprenden de sus errores y mejoran.
Otro aspecto negativo, una oposición con Neptuno, que está en Sagitario. Julián es un idealista sensible al que le duele mucho equivocarse con la gente. Quizás sea un poco esquivo al principio, pero una vez ganada su confianza, lo hace sin reservas. Tiene tendencia a idealizar a la gente que aprecia y esto siempre lleva a la decepción. Otro efecto secundario es que puede cerrarse demasiado si está dolorido y hacer que paguen justos por pecadores.
Ahora vienen los aspectos favorables. Venus, Marte y Plutón, todos en Libra, hacen trígono a su Luna, useasé, atractivo, atractivo y atractivo. Tío, tienes que tener muchas fans. Los trígonos son como puertas que se nos abren, cosas que obtenemos sin mucho esfuerzo. A mi esto me intriga muchísimo de ti. Tan serio y escurridizo que pareces, y los astros marcan un atractivo que no se puede aguantar. Claro que como eres Virgo modesto y tienes un Asc. retraído, no me extrañaría que no sacaras partido. Muchos adoptan el papel de caballero sin serlo, porque creen que es así como nos gusta a las mujeres que nos conquisten. Tú no tienes que interpretar nada, tú naciste con aura de caballero y encima eres tan buen conversador como oyente.
Por mencionar algo distinto, el trígono con Venus aporta buen gusto y alergia a la vulgaridad. Marte te aporta entusiasmo y efusividad. Plutón intensifica tus emociones y te permite profundizar en las de otros.
Siento que la Luna de Julián ha quedado coja. Me falta algo y creo que me quedará todo más completo al enlazar esto con Saturno. Planeta del que no hemos hablado y que por eso no menciono, lo que me deja esta sensación de no estar todo dicho. Mi intención es que el concepto de Luna en Géminis quede más o menos claro, porque pienso que será más fácil comprender lo que está por venir.
La Luna de Julián está en Géminis y no se siente del todo cómoda. La Lunita, tan maternal, emotiva, acuosa y dependiente, se encuentra en el signo más contradictorio y más inquieto de todos. La Luna es emoción y Géminis pensamiento. Y del rápido. La Luna es mono y Géminis es multi. La Luna quiere estabilidad y Géminis se horripila cuando escucha esa palabra. Si sumamos a esto la poca agua (sentimientos) que tiene en su carta, es lógico que Julián sienta que no puede resistir tanta contradicción y desee ser una piedra inconmovible.
Por partes.
Llama la atención que siendo hijos de la misma madre (enhorabuena Señora, hay que ver que pedazo de hijos le han salido) Kco y Julián, no han recibido la misma influencia. Los dos la adoran, pero Kco se ha quedado con todo y Julián con una parte.
Me veo en la obligación de unirme un poco a Julián a la hora de hablar de su Luna en Géminis. Julián y yo somos tremendamente afines (no es por presionar, che, te lo juro que es así). Mucho aire, una Luna comunicativa y poca agua. Mi Luna está en Libra, signo de aire también y creo que se nos suele tratar de manera injusta. Las Lunas en fuego por intensas, las de agua por masocas, las de tierra por fiables, todas parecen tener algo que gusta más que una Luna en aire. Se nos tacha de fríos, mentirosos, infieles, despegados, por enumerar algunos de nuestros “defectos”. Pero claro, cuando el mundo se pone patas arriba y no entiendes nada ni sabes que decisión tomar ¿a quién le vas a dar el coñazo? A tu amig@ con Luna de aire, porque sabes que te escuchará, que no te juzgará, que detectará tu estado de ánimo y después será capaz de desmenuzar el embrollo en el que te metiste, con la objetividad que a ti te falta. Y esto es un puto don.
Queda muy bonito parecer que “vives” más. Tendemos a tomar como incompatibles la razón y la pasión. Parece que sentir excluye el pensar y viceversa, y en la vida hay que hacer de todo. Sí se pudiera crear una carta natal ideal debería existir una proporción de planetas, signos y elementos. Ni más de una cosa u otra, un poquito de todo. Julián es una persona cuyo punto fuerte es la intelectualidad y la comunicación y anda algo escaso de emocionalidad, cosa que no significa que sea frío, más bien, que lo emotivo es un terreno que le cuesta reconocer y manejar. Es una cuestión de “torpeza”, no de ausencia. Al don de la objetividad se le saca mucho rendimiento. Partiendo de la neutralidad es como se logra alcanzar la distancia necesaria para juzgar a todos, incluido uno mismo, con la mayor imparcialidad posible, y que te salva de hacer de la autocompasión una residencia permanente. El riesgo es que el alivio que se encuentra al razonar con lógica, se nos vaya de las manos y rechacemos cualquier impulso por sistema, justificando que no merece la pena complicarse la vida por algo tan poco fiable como los sentimientos.
Si la Luna es el refugio al que todos acudimos de vez en cuando, en Géminis el consuelo se encuentra en la información, lectura, aprendizaje, y por supuesto, en la comunicación. Julián es rápido de mente, no me extrañaría que también tuviera la capacidad de leer rápido y recordar lo leído con detalle. Tiene una curiosidad estudiantil que no le abandonará así llegue a los cien años. Quizás sea poco constante, aunque pienso que siendo Sol en Virgo, prevalecerá su sentido de la responsabilidad. Todo lo nuevo le llama la atención, no juzga hasta que no conoce una idea, pero por mucho que se entusiasme, si al profundizar en la materia (o persona) se aburre, cambiará de tema inmediatamente. A Julián le encanta conversar y contrastar opiniones. Todo esto es como muy “mental” pero la Luna protagoniza y rige la mayoría, si no todas, nuestras respuestas emocionales, y aquí es donde viene el patinazo.
Una persona orientada hacia la reflexión por su Luna necesita comprender la teoría de la vida. Incluida la de sus sentimientos y por eso, ante una situación emocional es muy fácil que Julián se sienta desbordado. La razón no es otra que el mal manejo de los propios sentimientos que genera dicha situación. Su impulso automático es el de tomar distancia, ser neutral y abordar el asunto con talante dialogante y lógico. No hay que olvidar que su Asc está en Cáncer y que su percepción es alta, quiero decir, sus emociones están ahí, enterraditas y cuando salen fuera lo hacen sin control alguno. Y la falta de control es algo que pone muy nervioso a un Virgo. Julián tiene que pelear contra el efecto que le producen las emociones de los demás, las suyas propias y lo intenta desde la razón. Ahí viene el cortocircuito. La lógica de los sentimientos no tiene que ver con la lógica tal cual. La influencia de Libra le hace muy susceptible a la agresividad, que no soporta ni tolera, y que aunque no dudo de su capacidad de reacción, en el fondo le entristece mucho no poder solucionar por las buenas sus conflictos. Los reproches que surjan por el camino harán mucha mella y Julián posiblemente se esfuerce en controlar el daño. Para ello razona, pero como no es una máquina, la vehemencia y el padecimiento ajeno le afectan. No es muy difícil hacer que Julián se sienta culpable. Su Sol en Virgo siempre creerá que podía haber hecho mejor las cosas, su stellium en Libra depende más de lo que le gusta reconocer, de la opinión de los demás. Ahora bien, encabronado la cosa cambia. Es un argumentista nato y muy rápido, al que es muy difícil superar en acidez. Los chantajistas emocionales están perdidos con Julián. Los que solo buscan camorra, también.
Su Luna está en la Casa XI, la de los amigos e ideales colectivos. Es la casa del grupo y Julián es ahí donde se nutre emocionalmente. El intercambio, la conversación y la complicidad con sus amigos, le hacen sentir seguro. El primer aspecto negativo es una cuadratura Sol en Virgo y Luna en Géminis. Hay cierto desfase sin solución, entre tus aspiraciones y emociones. Virgo es inseguro, pero es activo. Virgo ante cualquier cosa de la vida se preocupa, sobredimensiona, saca fallos y se caga de miedo. Pero su alto sentido de la responsabilidad no le permite quedarse quieto. Algo tiene que hacer y lo hará. Hasta ahí bien. Lo malo es que la Luna geminiana tiñe sus emociones en forma de dudas “técnicas”. Comenzará a vacilar, a pensar demasiado y a poner todavía más nervioso a su Sol en Virgo. Hay una tendencia a desplegar demasiadas opciones, que en el fondo lo que hacen es demorar la actuación ante la situación que tenga entre manos. Pero bueno, son como nervios y la experiencia, verse así mismo como va superando obstáculos, será su mejor ayuda. Lo de bueno de ser Virgo, y de Julián en particular, es que aprenden de sus errores y mejoran.
Otro aspecto negativo, una oposición con Neptuno, que está en Sagitario. Julián es un idealista sensible al que le duele mucho equivocarse con la gente. Quizás sea un poco esquivo al principio, pero una vez ganada su confianza, lo hace sin reservas. Tiene tendencia a idealizar a la gente que aprecia y esto siempre lleva a la decepción. Otro efecto secundario es que puede cerrarse demasiado si está dolorido y hacer que paguen justos por pecadores.
Ahora vienen los aspectos favorables. Venus, Marte y Plutón, todos en Libra, hacen trígono a su Luna, useasé, atractivo, atractivo y atractivo. Tío, tienes que tener muchas fans. Los trígonos son como puertas que se nos abren, cosas que obtenemos sin mucho esfuerzo. A mi esto me intriga muchísimo de ti. Tan serio y escurridizo que pareces, y los astros marcan un atractivo que no se puede aguantar. Claro que como eres Virgo modesto y tienes un Asc. retraído, no me extrañaría que no sacaras partido. Muchos adoptan el papel de caballero sin serlo, porque creen que es así como nos gusta a las mujeres que nos conquisten. Tú no tienes que interpretar nada, tú naciste con aura de caballero y encima eres tan buen conversador como oyente.
Por mencionar algo distinto, el trígono con Venus aporta buen gusto y alergia a la vulgaridad. Marte te aporta entusiasmo y efusividad. Plutón intensifica tus emociones y te permite profundizar en las de otros.
Siento que la Luna de Julián ha quedado coja. Me falta algo y creo que me quedará todo más completo al enlazar esto con Saturno. Planeta del que no hemos hablado y que por eso no menciono, lo que me deja esta sensación de no estar todo dicho. Mi intención es que el concepto de Luna en Géminis quede más o menos claro, porque pienso que será más fácil comprender lo que está por venir.
27 comentarios:
Sk,
He leído la luna de Julián y he encontrado tantas similitudes conmigo. Esa influencia de Géminis y Virgo es un arma de doble filo. Lo se por experiencia.
A ver qué opina Julián de esto.
PD. Felicidades :)
buenísimo, sk.
una vez más.
me repiquetea saturno...
lo tengo preparado...
lo aguanto...
Condesa, no tengo tu carta. He ido ahora a mirar y no la tengo. Seguro estaba en el otro pc y ese lo formateé por la navidá. Cuando me mandes fonos, direcciones y demás, mándame datos para la carta.
Virgo y Géminis funcionan como el resto, depende como caigan para complicar o facilitar la existencia.
Leoncio, imperativamente te suplico, que primero va Júpiter.
Gracias, Gatos.
Uy, esto de ser una casi nueva pasajera me despista...
No sabía que Julián y Kco son hermanos.
Sk. me encanta cómo escribís hasta una carta natal...
"Leoncito, imperativamente te suplico, que primero va Júpiter."
ufa, había pensado correrme del plan original.
Kco:
¡Nene, ya es hora de que publiques algo!
Es la tercera vez en el día que entro y me decepciono.
Jaja.
Ya con esto te doy pie a que hagas otra de tus generalizaciones. Podría ser algo así como: "los actores son demandantes". Y luego publico en mi blog tu decálogo.
¿Cómo veníamos? Promiscuos, sigilosas...
¡Quiero las 10, eh!
jajaja
mirá, ante todo, las actrices son disipadas...
ahí publiqué algo.
estoy hecho trizas.
¿Disipadas de "desaparecidas" o de "libertinas, relajadas morales"?...
Qué buena que está esa expresión, bien de novela centro americana: ¡Carlos Enrique Acosta Méndez, eres un relajado moral!
En vez de decir: ¡Hijo de puta, te las volteaste a todas!
¡Cuánta clase que denotan algunas palabras!
es pregunta es una obviedad, nena: "disipada" de relajada moral.
esa*
¡¡Bueno, ne-ne!!
Flowers, gracias :DDDD
Buenísimo, Sk!!
Mil gracias. Tu escritura astrológica es adictiva.
Después te hago algunos comentarios más en detalle.
Mil de nadas :)))
Sk, yo, al igual que Loon, solía considerar a la Astrología una colección de mitos.
Encontrarme con tantos puntos de mi personalidad que tienen un anclaje astrológico y no ya con una historia personal (cosa de la que antes estaba convencido) ha sido para mí tremendamente revelador.
"Una persona orientada hacia la reflexión por su Luna necesita comprender la teoría de la vida. Incluida la de sus sentimientos y por eso, ante una situación emocional es muy fácil que Julián se sienta desbordado. La razón no es otra que el mal manejo de los propios sentimientos que genera dicha situación. Su impulso automático es el de tomar distancia, ser neutral y abordar el asunto con talante dialogante y lógico. No hay que olvidar que su Asc está en Cáncer y que su percepción es alta, quiero decir, sus emociones están ahí, enterraditas y cuando salen fuera lo hacen sin control alguno. Y la falta de control es algo que pone muy nervioso a un Virgo."
No podía dejar de rescatar este párrafo.
Verdad sin medias tintas.
"Lo malo es que la Luna geminiana tiñe sus emociones en forma de dudas “técnicas”. Comenzará a vacilar, a pensar demasiado y a poner todavía más nervioso a su Sol en Virgo. Hay una tendencia a desplegar demasiadas opciones, que en el fondo lo que hacen es demorar la actuación ante la situación que tenga entre manos."
Es muy probable que esto sea así.
"Julián es un idealista sensible al que le duele mucho equivocarse con la gente. Quizás sea un poco esquivo al principio, pero una vez ganada su confianza, lo hace sin reservas. Tiene tendencia a idealizar a la gente que aprecia y esto siempre lleva a la decepción."
Otra gran verdad.
Aunque te digo que no suelo decepcionarme de la gente (entendiendo por decepción un estado previo de "ilusión"). Tengo un filtro interno tan grande que cuando admito a alguien sin reservas, por lo general no me equivoco.
Sk, algún día voy a investigar en la carta natal de mi padre.
Lo de mi Luna me hizo recordar el hecho de que él era un Géminis y tenía exactamente las mismas características en cuanto a toda esta cosa intelectual, expresiva, conversadora, etc.
De hecho, yo siempre pensé que estos aspectos de mi personalidad eran producto de la genética.
Hablando de atractivo, mi padre era un tipo con un atractivo impresionante.
Cuando tenía ganas, cuando estaba de buen humor, no había con qué darle.
"De hecho, yo siempre pensé que estos aspectos de mi personalidad eran producto de la genética."
Y lo son. Los astros solo describen la tendencia. La genética, la educación y las decisiones que tomamos hacen el resto.
hola yo tambien soy de virgo,ascendente libra y con luna en geminis también..julian serás del 90?.. masomenos dieron en el clavo pero no creo ser frio en mis relaciones..tampoko esta la tendencia a mentir e imaginar,,menos variar..mmm yo creo que solo nos rige el signo solar en verdad...el resto lo ponemos nosotros..
No, anónimo. No soy de los 90's (¿o debería decir que sí, considerando que me formé sentimentalmente en esos años?).
Por qué no firmás con tu nombre y te sumás a la troupe?
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