viernes, 21 de noviembre de 2008

no importa cuán horrible sea el mundo.
el paladar siempre tiene tesoros que descubrir.

21 comentarios:

Julián dijo...

Esa cuestión de que el mundo es horrible me tiene podrido.
Lo único que falta es que venga alguien a decir que le gusta el tango Cambalache. Bah...

Julián dijo...

No lo decía por vos, Joaquín, está claro.

Julián dijo...

Señores: odio a Enrique Santos Discépolo.
;)

Julián dijo...

Quiero decir que no me gustan una mierda sus tangos.

Julián dijo...

Bueno, sus tangos, su filoperonismo, su forma de pararse ante la vida, etc.
Pero por sobre todo me molestan sus patéticas letras de tango.

Loon dijo...

Para mi tiene tangos lindos: Uno, Malevaje, y Cafetin de Buenos Aires (cantado por Rivero) me parece buenisimo.

Julián dijo...

Loon, estaba hinchando un poco las pelotas, nada más.
La realidad es que, en general, no me gusta el patetismo fácil en que suelen caer muchas letras de tango, y veo en Discépolo a un fiel exponente de eso, sobre todo en dos de sus letras emblemáticas: Cambalache y Yira, Yira.
Resumiendo: no me gusta Discépolo, eso es todo. Aunque pueda reconocer en sus letras algunos pasajes inspirados.

Julián dijo...

Por otra parte, leyendo sus letras percibo a un tipo con una carencia de afecto enorme.
Eso no puede generarme otra cosa más que empatía.

Iconoclastia dijo...

A mi me encantaría saber bailar tango, pero tengo los pies chuecos y no se usar tacos :(

n., dijo...

Yo empiezo a tomar clases de tango el año que viene.

n., dijo...

Es una deuda pendiente. Eso y retomar árabe.

Kco dijo...

ahora que dejaste el conservatorio tenés tiempo.

n., dijo...

Leer eso todavía me duele.

n., dijo...

Sí, digamos que tengo más tiempo que antes pero tampoco es que estoy al pedo. El año que viene va a ser pesado aún sin tener el conservatorio.

Julián dijo...

"Yo empiezo a tomar clases de tango el año que viene."

Hace rato que me siento lejos del tango.

Anónimo dijo...

El tango es tan grave que me deprime con el segundo compás.

El Príncipe Leve

n., dijo...

¿Vos te das cuenta de que en tu afán de ser tan leve dejás de serlo?
Dejá de pensar si las cosas son leves o no y vivilas.

n., dijo...

Bah, hacé lo que quieras. No me leas.

Anónimo dijo...

Tu profundidad me cae como un guiso de lentejas al mediodía en pleno verano.

El Príncipe Leve

Julián dijo...

"El tango es tan grave que me deprime con el segundo compás.

El Príncipe Leve"

jajajajajajaja

n., dijo...

Vos me caés como un guiso de lentejas al mediodía en pleno verano! Vos y tu supuesta levedad.