martes, 21 de abril de 2009

Loco, pero no boludo

"...Richard Bandler y John Grinder se ganaron el mote de «interruptores de patrones» en la época en que ejercían como terapeutas privados. Bandler cuenta el caso de una visita a un instituto para enfermos mentales, donde les fue presentado un hombre que decía ser Jesucristo..., no metafóricamente, ni en espíritu, sino en la carne. Cierto día Bandler fue a verle. «¿Tú eres Jesús?», le dijo. «Sí, hijo mío», respondió el hombre. Bandler dijo: «Volveré dentro de un minuto». El hombre se quedó algo confuso. Al cabo de un rato Bandler regresó con una cinta métrica, le dijo que pusiera los brazos en cruz y le midió la envergadura y la estatura de la cabeza a los pies, tras lo cual Bandler volvió a salir. Esta vez el hombre se quedó algo preocupado. Poco después, Bandler volvió con un martillo, varios clavos grandes y unos maderos, que empezó a clavar en forma de cruz. El hombre le preguntó: «¿Qué haces?». Richard clavó el último clavo y preguntó: «¿Tú eres Jesús?». Otra vez el hombre respondió: «Tú lo has dicho, hijo mío». Bandler dijo: «Entonces, ya sabes por qué estoy aquí». De pronto, no se sabe cómo, el hombre recordó quién era en realidad. Su antiguo patrón dejó de parecerle buena idea. «¡No soy Jesús, no soy Jesús!», se puso a gritar. Caso resuelto..."

5 comentarios:

Julián dijo...

Extracto de un libro que estoy leyendo.

Julián dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Kco dijo...

qué puede aportar el licenciado a esto?

Mr Burzum dijo...

todo esposible, nunca se puede predecir la respuesta de un psicótico... pero me suena a chiste el relato y no a la respuesta de un delirante.

yo por las dudas nunca me quedaria con un loco, matillo y clavos.

Anónimo dijo...

Sin dudas tiene algo de humor la anécdota, aunque se me ocurre que debe funcionar con gente de salud mental aceptable.

Julián.