miércoles, 6 de mayo de 2009




Recién me puse a cambiar el foquito de la lámpara que uso para el mueble de la computadora y, al mirarlo, se me dio por pensar en su estructura casi idéntica al patentado por Edison allá por 1879.
Por supuesto, hablo de los focos incandescentes, esos que a mí todavía me gusta usar cuando busco, deliberadamente, un tono de luz no demasiado blanco.
Mas allá de cualquier objeción que pueda hacérseles, lo reconozco, me gusta terriblemente la vigencia de este chirimbolo.

7 comentarios:

Kco dijo...

amo la luz.

Kco dijo...

los foquitos y los encendedores.

Anónimo dijo...

Che, ese foco se parece a una teta.

Esperanza

Julián dijo...

Esperanza, sos como los peronistas: incorregible.

Julián dijo...

Hablando de encendedores, el otro día, haciendo un poco de orden en Martínez, reapareció mi querido encendedor Colibrí.
Se acabaron los malditos fósforos.

n., dijo...

Buena foto.

Julián dijo...

Sí, la verdad es que está muy buena.