jueves, 22 de octubre de 2009

Deseo...

Por lo menos un año sin escuchar nada de los fallecidos J. D. P. y su esposa Eva.

25 comentarios:

Flowers dijo...

Me tienen los ovarios al plato las mitificaciones...

Kco dijo...

lavate la boca antes e hablar de evita.

Flowers dijo...

¡Zopenco!

Algún día voy a subir imágenes del manual del que te hablé hace mil, con el que estudiaban los niños de primaria en esa época.
Lamentable: mi mamá me mima, evita me ama, evita ama a perón. Puaj!

Julián dijo...

che, F., no quiero sonar mala onda, pero si pretendés vivir en un lugar en el que no se nombre a alguno de esos dos personajes durante al menos una semana, andate de Argentina.
Este país es peronista, entendelo.
Es culturalmente peronista. Son peronistas hasta los que no creen serlo.

Julián dijo...

Ese libro del que hablás lo llevó un alumno cuando yo estaba de auxiliar en la cátedra de García Hamilton.
El culto al líder, la exaltación del militarismo, etc., eran algunos de sus sellos. Perón en realidad admiraba a Mussolini, eso se sabe, con lo cual no puede sorprender a nadie que instalara un régimen fascista. El propio Perón era militar, un tipo con una estructura mental jerárquica y que había participado de un golpe de Estado (1943). ¿Podía esperarse un demócrata? Por supuesto que no. Ahora bien, ¿qué anticuerpos tuvo la sociedad para evitar a ese personaje? Ninguno. Como tampoco tuvo anticuerpos para evitar el mamarracho de un presidente ungiendo candidata a presidenta a su propia esposa. Este país es una vergüenza tras otra, F. No le pidas peras al olmo.

Flowers dijo...

Pero los deseos a menudo son irracionales, J.

Kco dijo...

a ver si te dejás de joder con la imagen de una santa como evita...

Kco dijo...

boca sucia.

Kco dijo...

indigna.

Kco dijo...

oligarca.

Kco dijo...

asquerosa.

agustín dijo...

"Son peronistas hasta los que no creen serlo."

muy bueno juli, y es así.
muchas argentineadas son, en realidad, peronacheadas.

Flowers dijo...

Jaja, "peronacheadas". Me gustó. Quiero ejemplos.

Julián dijo...

Agus, recordé una escena.
Hace unos años, un camión que transpotaba hacienda volcó en la ruta, relativamente cerca de un asentamiento.
Al ver las vacas dando vueltas fuera de la jaula, una horda de salvajes se abalanzó sobre ellas, cuchillos en mano, para descuartizarlas.
No les importó que esas vacas tenían un dueño, que alguien las había críado, tal vez arrendando un campo, había pagado pasturas, vacunas, fletes, etc. Todo durante largos años hasta que los animales estuvieran listos para faena.
Esa brutalidad, esa ausencia total de respeto por el otro, de mínimo sentido de convivencia y apego a la ley, todo eso y mucho más es para mí el peronismo.
Yo no sé si esos tipos eran formalmente peronistas. Pero lo eran, qué duda cabe.

Julián dijo...

* transportaba

Flowers dijo...

Qué escenita, eh.

agustín dijo...

hoy a la mañana como todos los días me tomé el subte. dentro de la estación, el policia de turno estaba fumando un cigarrillo justo debajo del cartel que indicaba prohibido fumar. hasta ahí, un acto argentino. pero si lo denuncías, el jefe de este muñeco te dice: pero pobre hombre, está trabajando todo el día, mirá si lo voy a reprender por fumar un cigarrillo en un lugar prohibido. ese para mi es un acto peronista, cargado de comprensión paternalista y acompañado de la guiñada de ojo cómplice y decadente.

agustín dijo...

si bien el ejemplo no es terrible, el modus operandi es reproducido a otra escala en millones de circunstancias cotidianas.

Julián dijo...

Tal cual. Muy buen ejemplo.
Es peronismo es, por sobre todas las cosas, paternalista. Y como todo paternalismo, te saca libertad y responsabilidad en dosis iguales.
El argentino medio no sufre gran cosa la falta de libertad, porque nunca la tuvo realmente. En la sociedad colonial no existía, y después, entre tanto golpe de Estado, poco y nada. Lo que en cambio el argentino medio aprecia como ninguna otra cosa es la falta de responsabilidad. Siempre la culpa es de otro (llámese oposición, sinarquía internacional, yanquis, Fondo Monetario, etc.), le gusta violar normas sin que lo "repriman" porque después de todo "eh, me vienen a joder a mí por cortar una ruta, y los chorros de los políticos que se roban todo andan caminando por la calle...". Y así. Todo justifica todo. Nunca hacerse responsable de uno y de sus actos. Así una sociedad no madura nunca.
Les recomiendo dos grandes libros para tratar de empezar a entender este aquelarre: "Autoritarismo Hispanoamericano" y "Por qué crecen los países"; ambos de José Ignacio García Hamilton.
Hay muchos otros, pero recomiendo éstos porque los he leído a conciencia.

Anónimo dijo...

¡Qué grande soy!

Juan Domingo

Mr Burzum dijo...

che... este blog está repleto de gorilas, que los re parió!

Anónimo dijo...

Adoro este blog.

Donkey Kong

Julián dijo...

Qué curioso ese calificativo, che, cuando en realidad no hay nada más parecido a un gorila que un peronista (con el perdón de los señores gorilas).
¡Qué comentario más gorila!
Debe ser la costumbre de andar con oligarcas como vos, Burzum.

Julián dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Burzum es un facho.

Esperanza