viernes, 30 de julio de 2010

"Si le suena el teléfono, creo que Bianchi responde"


Guillermo Coppola dice que almorzó con el Virrey y que piensa que esta vez sí el DT aceptaría conversar con Julio Grondona para suceder a Maradona en el seleccionado 

Oficina en el Microcentro

jueves, 22 de julio de 2010

"Una dramática decisión"


Así tituló hoy Morales Solá su columna en La Nación. Confieso que cuando ví a Macri sin bigote pensé lo mismo. Después de más de 20 años de uso ininterrumpido un bigote no tiene menos entidad que un brazo o una pierna. Se vuelve casi tan constitutivo de alguien como cualquier otra parte de su cuerpo. Pero no. La nota no hablaba sobre el extirpado bigote, sino sobre el pedido de juicio político.
 

martes, 20 de julio de 2010

un poco de no sé qué, pero un poco de algo

El artículo femenino la toma obligatoriamente la forma el cuando se antepone a sustantivos femeninos que comienzan por /a/ tónica (gráficamente a- o ha-), con muy pocas excepciones (  2.3); así, decimos el águila, el aula o el hacha (y no Marca de 
incorrección.la águila, Marca de 
incorrección.la aula o Marca de 
incorrección.la hacha). Aunque esta forma es idéntica a la del artículo masculino, en realidad se trata, en estos casos, de una variante formal del artículo femenino. El artículo femenino la deriva del demostrativo latino illa, que, en un primer estadio de su evolución, dio ela, forma que, ante consonante, tendía a perder la e inicial: illa > (e)la + consonante > la; por el contrario, ante vocal, incluso ante vocal átona, la forma ela tendía a perder la a final: illa > el(a) + vocal > el; así, de ela agua > el(a) agua > el agua; de ela arena > el(a) arena > el arena o de ela espada > el(a) espada > el espada. Con el tiempo, esta tendencia solo se mantuvo ante sustantivos que comenzaban por /a/ tónica, y así ha llegado a nuestros días

viendo la fuerte reacción que provocó la primera entrega, va la segunda

2.2. La fuerte asociación que los hablantes establecen entre la forma el del artículo y el género masculino —unida al hecho de la apócope frecuente de las formas femeninas del indefinido uno y sus compuestos alguno y ninguno ante sustantivos femeninos que comienzan por /a/ tónica: un alma, algún hada, ningún arma (  uno, alguno, ninguno)— provoca, por contagio, que se cometa a menudo la incorrección de utilizar las formas masculinas de los demostrativos este, ese y aquel delante de este tipo de sustantivos: Marca de 
incorrección.este agua, Marca de 
incorrección.ese hacha, Marca de 
incorrección.aquel águila, cuando debe decirse esta agua, esa hacha, aquella águila. El contagio se extiende, en el habla descuidada, a otro tipo de adjetivos determinativos, como todo, mucho, poco, otro, etc.: Marca de 
incorrección.«Desde que nacemos estamos [...] con mucho hambre» (Nación [Arg.] 1.7.92), en lugar de mucha hambre; Marca de 
incorrección.«El balón viajó por todo el área» (Mundo [Esp.] 30.10.95), en lugar de toda el área; Marca de incorrección.«Había poco agua y su coste era bajo» (Tecno [Esp.] 3.01), en lugar de poca agua. Hay que tener presente que el empleo de la forma el del artículo no convierte en masculinos estos sustantivos, que siguen siendo femeninos y, por consiguiente, exigen la concordancia en femenino de los adjetivos a ellos referidos; así pues, debe decirse el águila majestuosa (y no Marca de 
incorrección.el águila majestuoso), el acta constitutiva (y no Marca de incorrección.el acta constitutivo), etc. El uso erróneo de la forma masculina del adjetivo es más frecuente, pero igualmente inadmisible, cuando el adjetivo va antepuesto al sustantivo: Marca de 
incorrección.«Los niños [...] pueden distinguir cualquier diferencia fonética e integrarla en un único área del cerebro» (Abc [Esp.] 10.7.97); debió decirse una única área del cerebro.

jueves, 8 de julio de 2010

El Pulpo Paul aún no decidió si predecirá el resultado de España-Holanda


El molusco que se convirtió en el oráculo más famoso del Mundial se pronunciará mañana sobre el partido por el tercer puesto; todavía no sabe si se manifestará por el encuentro de la final 

Hace exactamente 15 minutos que un grupo de infradotados no para de tocar la bocina. Obviamente desconozco el motivo, aunque no tiene la menor importancia. Alguna calle semicortada, lo que sea. Es al pedo. El punto es que yo no puedo concentrarme para trabajar. Y lo de siempre: cagarse en el otro. Cómo me cuesta imaginar una vida acá. Estoy tan harto de vivir rodeado de maleducados.

lunes, 5 de julio de 2010

orgasmos

durante toda mi vida me dijeron que tener orgasmos, para la mujer, era complicado; que, por ejemplo, hay mujeres que nunca los tienen en su vida, que los fingen, que creen que los tienen pero que en realidad se equivocan.

de las relaciones de las que me han hablado (muchas), siempre tienen algún problema con esto: o los fingen porque su pareja las presiona; o no los tienen y dicen la verdad (lo que genera problemas en la pareja); o luego de un largo proceso de intentos y muchos fracasos, lo logran.

la pregunta del millón, para todas esas personas es: ¿qué falla?

las respuestas son infinitas.

la verdad de la milanesa es que, en mi caso, tener orgasmos es la cosa más fácil del mundo. he tenido orgasmos con toda la ropa puesta, y no es que hace años que tengo sexo, hace menos de uno. por eso es que no termino de comprender el problema y cuando mis amigas, primas y/o hermana me piden consejos, sólo puedo decir una cosa: para tener un orgasmo hay que dejarse llevar por el placer.

la clave de la dificultad del sexo, en mi opinión, es que, en general, no lo sienten como algo "natural", como un instinto animal que no tiene que pensarse demasiado.

para que el sexo sea bueno tiene que fluir. para que fluya hay que olvidarse de los taboos, de los miedos, de las preocupaciones, de si lo estoy haciendo bien o no. hay que ver el cuerpo de la pareja como un mapa que te guía sin quererlo, con la respiración, los movimientos, la piel, la mirada. hay que dejar que el propio cuerpo experimente libre, sin ponerse a pensar sobre la sensación que se está teniendo en el momento, sólo dejarla ser.

Anoche...

12 de la noche, minutos después de haberme acostado, suena el teléfono. Kari se levanta y atiene.

-Hola?… Sí, soy yo…
Quién es? –le pregunto.
La Policía –me contesta.
Cortá.
Corta.
Suena de nuevo el teléfono. Atiendo.
-Hola (con una voz de ojete tremendo)
-…Buenas noches, caballero, llamamos de la comisaría 23 para…
-Qué quiere?
-Tenemos un auto secuestrado, dos individuos que perdieron la conciencia pero antes de ello dejaron el nombre de Karina y este número telefónico…
-Quiénes son esas dos personas?
-Permanecen no identificados, por ahora NN.
-Bueno, si son NN entonces no le voy a dar ninguna respuesta.
-Caballero, entonces enviaremos un patrullero a su domicilio a labrar un acta por no querer dar información.
-Ustedes pueden venir. La puerta no se las voy a abrir.
Corto.
Corto y sueño toda la noche historias violentas. Me veo entrando intempestivamente en casas ajenas, gritando y maltratando a todo el mundo.
Me despierto tensionado, con el instinto animal asesino a flor de piel.

domingo, 4 de julio de 2010

Vamos a decirlo claro: Argentina ya no es una potencia en fútbol. Esos partidos que hay que ganar, hace 20 años que venimos perdiéndolos. Desde el punto de vista de las potencias, somos unos chotos, unos losers.