viernes, 2 de noviembre de 2012

Desayuno

Hoy me desperté tarde y salí de mi casa a las corridas para llegar a tiempo a una llamada. En mi apuro, olvidé comprar mi desayuno en el lugar habitual, el bar Barista: café con leche y tres medialunas por $13, por lo que decidí entrar en Havana. Me acerqué a la barra e hice mi pedido:

—Un café con leche y tres medialunas, por favor.

Esperé unos minutos, me entregaron un vaso caliente y una bolsa con las facturas

—Son 36 pesos —me dijo el cajero. Me quedé duro como un sábado a las 5 de la mañana.

Estuve a punto de abrir la bolsa para ver si adentro había algo especial, hacerme el gracioso, no sé, pero no pude.

Pagué y salí del local rengueando.

2 comentarios:

Julián dijo...

"Pagué y salí del local rengueando."

jejejeje
está duro el asunto...
13 es muy poco; 36 es una barbaridad...

Kco dijo...

jejeje

sutilezas...