miércoles, 11 de diciembre de 2013

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Recuerdo ese partido, duró mil años.

Kco dijo...

por dios, qué partidazo!!

a coria lo recordaba más masita para pegarle a la bocha. qué mal lo recordaba!!

es un partido hermoso. lleno de delicadezas.

Julián dijo...

Tas loco! Coria era muy agresivo para jugar (además de tener un talento superlativo y un nivel de delicadeza muy alto).
Sufrí muchísimo el eclipse de su figura. Claramente merecedor del apodo "Mago". Un crack de la raqueta. Y bue, de Nadal qué vamos a decir? Un partido de antología, realmente. Final más larga de la historia de Roma.

Julián dijo...

Me gusta este partido además porque es la refutación total de la tesis "después de la final perdida con Gaudio se cayó".
No es cierto. Simplemente apareció Nadal. Y después vino su fatídico cambio de entrenador y su operación de hombro.
Una verdadera pena. Coria era de esos tipos que realmente me emocionaban. Magia pura.

Julián dijo...

Por último, creo que Coria era el único que podía jugarle de igual a igual a Nadal en arcilla, con lo cual también por ese lado fue una cagada lo que le pasó.
No digo que le habría ganado la mitad de los partidos, pero sí no tengo dudas de que Nadal no habría llegado al récord de partidos invictos al que finalmente llegó.
Básicamente, al caerse Coria, casi no le quedaron rivales de su nivel en esa superficie. Y esto va más allá de cuántos títulos podría haber ganado o no. Simplemente me refiero a la cantidad de partidos así que podrían haber existido.