miércoles, 24 de junio de 2009

Anaïs Nin -diario 1932-

Me niego a vivir en el mundo ordinario como una mujer
ordinaria.
A establecer relaciones ordinarias.
Necesito el éxtasis.
Soy una
neurótica, en el sentido de que vivo en mi mundo.
No me adaptaré al mundo.
Me
adapto a mí misma.

10 comentarios:

n., dijo...

Grosa.

Leí eso hace unas horas, cuando me puse a averiguar sobre este personaje.

Iconoclastia dijo...

Como poesía y filosofía de vida puede sonar muy excitante. Yo la comparto, aunque la vida práctica no siempre funciona, ni puede funcionar, así.

n., dijo...

Ic, yo creo que ella lo logró.

Flowers dijo...

Sí, yo también creo lo mismo, n.

Iconoclastia dijo...

Si, vaya. No me refiero a que sea imposible lograrlo, más en una persona como ella. Pero creo que no siempre se puede. Muchas veces las circunstancias no te lo permiten.

Sin embargo, el sólo hecho de que alguien pueda hacerlo es bastante inspiración para cualquiera.

P.D. Como siempre, Ic - haciendo honor a su nombre virtual - viene a romper todo el romanticismo de n. y Flowers, espero no me odien por eso. xDDDD

n., dijo...

jajajaja, pero por favor Ic. Por lo menos yo no tengo quejas ;)

Coincido con vos. El medio circundante no siempre lo permite. Pero, por lo menos no es imposible =)

Flowers dijo...

Jajajaja. ¡Qué aparato!

Sk dijo...

Como decís los argentos, yo suscribo lo que ha dicho la Condesa. Lo único, que habría que definir que es lo ordinario y lo que no. Personalmente me indentifico con el párrafo al completo y mi vida no tiene nada de extraordinario. Aunque claro, según yo, no adaptarse al mundo y adaptarse a una misma es una tarea bien jodida, vitalicia y de por sí, extraordinaria.

Sk dijo...

Hay palabros que le complican a una la vida. Extraordinario, ordinario... bah.

agustín dijo...

hola, estoy con Ic. miren la tanda.